Fanos finas que entrelazan hilo a hilo, de ellas
surgen las más bellas piezas tejidas, nacidas de la entrega y el amor de
Graciela Pérez, ariguanabense, artesana nominada al Premio de la Maestría
Artesanal en el 2006 y maestra de
profesión.
Hoy cumple años esta eterna joven, dulce, feliz que
resultó nominada también al Premio Nacional de Cultura Comunitaria, por la
labor que rescata en los talleres de creación de tejido crochet, en el
Ariguanabo.
Graciela es graduada en la especialidad de Historia en el Instituto de
Superación Educacional en 1979, además de Español y Literatura en el
Instituto Superior Enrique José Varona 1981, fue Directora Municipal de Educación en el territorio de Güira de
Melena, laboró en el sector educacional hasta que se jubiló.
De su ojos brota el amor por el tejido, siendo una niña
aprendió a tejer gracias al legado familiar, aprendió lo esencial de la técnica
que luego perfeccionó y resultó muy útil para la confección de las ropas.
Graciela se vinculó definitivamente al arte de tejer
luego de su jubilación, se reunía con un grupo de amigas y tejían.
Transcurrieron algunos años y después inició el
primer taller de tejido en la Universidad del Adulto Mayor en el territorio con lo cual adiestra a las
mujeres en este arte.
Es miembro de la
Asociación Cubana de Artesanos Artistas (ACAA), fue nominada al Sello Excelencia de la UNESCO y
ostenta las distinciones Rafael María de
Mendive en 2007; Por la educación cubana 1985; por la Alfabetización 1989 y
Conmemorativa 40 aniversario de las FAR 1997.
Felicidades Graciela, no sólo por cumplir otro aniversario, sino por ser la madre
también de muchas tejedoras del Ariguanabo, felicidades por regalar la sonrisa
que siempre aflora en tus labios y por ser la reina del tejido en San Antonio de
los Baños.
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