San Antonio de los Baños- municipio según los
especialistas agrícola, yo diría más
bien cultural- cuenta con miles de mujeres insertadas en varios sectores,
espacios donde con los años, ganan ellas en superación, tal vez,
empoderamiento, quizás, independencia, pero… aún falta.
Las mujeres de esta tierra defienden espacios y momentos
para trazarse como llevar esta vida en la que muchas son víctimas de la
violencia sin darse cuenta y está el hecho de que a veces la prensa comete
violencia hacia la mujer sin apena notarlo. Aquí va mi ejemplo una pregunta de
una entrevista:
-¿Cómo te las arreglas para dirigir, llevar la casa,
atender a tu esposo y a los niños?
- ¿Cómo te sientes al ser delegada siendo mujer?
-¿Cómo es posible que una presidenta de cooperativa
pueda dirigir a tantos hombres?
Pienso que hay que replantearse como llevar esas preguntas,
si la hacemos así, damos por sentado que somos unas “miserables”. El tema es
buscar o hacer preguntas, discursos, trabajos que puedan reflejar a la mujer de
otra manera, esas preguntas es llover
sobre mojado y sin querer estamos haciendo ver que esa mujer…. Ufff que trabajo
les da su responsabilidad, a fin de
cuentas nos toca a todos como seres humanos que somos.
La radio debe buscar otras manera de dirigirse a esa
mujer ariguanabense de 15 a 70 años, que trabaja en casa, en el barrio, en su
centro laboral, que es cocinera, presidenta, jinetera, doctora y demás..
No creo en recetitas y consejos de belleza para y hacia
la mujer, es bueno tenerlos ahí pero no es todo. ¿Por qué no traerlas acá y
escuchar sus historias? ¿Por qué no socializar más? ¿Por qué no hacer una
encuesta sobre que desea o necesita la mujer? Los hombre dicen “nunca se sabe
que quiere una mujer, a ellas no hay quien las entienda”.
No siempre una delegada, una diputada o una directora
tiene algo que decir, no señor, veamos también que nos tiene que decir la
barrendera, a la quinceañera que se quedó sin carrera y arregla uñas en el
portal de su casa, o a la negra que no clasificó en la audición de danza, sonde todos pensamos que podía
ganar.
Abogo por que la radio participe en la vida de sus oyentes, en este caso mujeres, abogo
por caminar y buscar historias, no que llamen para una canción de amor la más
cursi que se pueda radiar.
Hay que hacerles esa vida mejor, a ellas que muchas son
víctimas de la violencia sin apenas darse cuenta que junto a ellas camina la violencia
de género, la física, la verbal,
económica, psicológica….
Me enorgullece ser mujer, soy 80 por ciento feminista, en
las más de 100 vidas que tengo seré mujer también…somos maravillosas, allá el
que no lo entienda.
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