Nada
se consigue en la tierra sin un criterio científico en la siembra y la
preparación de los suelos. Así me dijo una vez un campesino.
La
capacitación es tan necesaria como la cosecha misma, la metodología
correcta para la preparación de la tierra y el empleo adecuado de los
productos químicos, ayudan a perfeccionar el trabajo de todo productor,
más ahora que mutan las variedades, el clima y existen nuevas plagas. El
enfrentamiento a esta situación requiere capacitación y disciplina.